lunes, 13 de abril de 2015

A la causante de mis sonrisas.

Eres la motivación de hacer lo de siempre como nunca.

Mi insomnio y mis ganas de levantarme temprano.

Mi particular excusa para huir y no volver.

La excepción de todas mis normas.

Las ganas de saltarme todas las reglas y desafiar a las leyes de la gravedad.

La creadora de un idioma escrito a base de sonrisas.



Eres esa porción de cielo azul que cayó a la tierra con la que tuve la suerte de toparme.

Esa incertidumbre certera.

El "no sé" que sólo un "quizás" puede describir.

La causa de que nunca lleve batería en el móvil.

La culpable de que en mi mp3 siempre suene la misma canción.

Esa que me recuerda, secretamente, tanto a ti.



Eres todas las palabras que no sé formular en el orden adecuado.

La inexplicable sonrisa que surge en mi cara cada vez que me escribes.

El poema que tantas veces he intentado recitar.

Las ganas de "versarte". 

El tiempo perdido en escribir una inútil y vaga sinopsis de qué eres.



Eres la causa de todos los tachones de mi cuaderno favorito.