Buenos días

¿Cómo cojones voy a darte los buenos días si aún no te he dado las buenas noches en condiciones?

Dime.
Dime amor,
Y lo dejo todo.

Te saco a bailar,
Y me pierdo en tu pelo
(O entre tus piernas)

Que quiero que nos comamos los kilómetros con las ganas,
Que nos miremos a los ojos y nos sobren las palabras,
Que morderme los labios no signifique tu ausencia,
Y que los suspiros se que se nos escapen sean entre orgasmos.

Me encantas.
Cómo hacerte saber que me encantas.
Cómo conseguir que sepas que me vuelves loca.
Que viré en el límite de la cordura
Y te vi.
Me encontré en tus ojos.
Me sentí en la casa en la que nunca estuve.
Pero en casa.

Ven.
Dame la mano.
Huyamos.
Vámonos,
Que quiero conjugar el verbo correr contigo
Hasta hacerte llegar.

¿A dónde?
A tus buenos días, cariño.
A tus buenos días.

Mus

En España hoy, pintan bastos.

Castillos de naipes.

Reyes de la avaricia que nos someten entre oros.
Guiándonos, como si fuésemos becerros, al matadero.
Y nosotros, que no desenvainamos espadas.
¡Inconscientes confiados!
Sin nosotros, ellos no son nada.
Para jugar se necesitan 40 cartas.
Y si echamos cuentas, son 10 oros para 30 cartas

Ellos juegan a la grande.
Confían en ganar el juego.
Chica y pares, es nuestra.

¡Ordago a chica! ¡Ordago a pares! ¡Ordago a vuestro aplastante sistema!
Que ya habéis tenido suficiente.
Que (NO) lo siento.
Que sin nosotros no hay juego.

A trileros ganáis.
Maestros del engaño.
Vuestro juego es de boquilla.
Y se os va la fuerza por la boca.

Nos habéis obligado a hacer esto...
Caballeros,
Alzad vuestras copas,
Brindemos por nuestra valentía.

¿Listos?

Desenvainen sus espadas.

A POR ELLOS